Obsidiana espejada (negra) con ojal y cordón plateados, 4 cm

Diámetro del espejo de obsidiana: 4 cm
El colgante de obsidiana tiene un ojal de plata (plata 925).
Longitud y color de la correa de tela: aprox. 90 cm (longitud máxima de uso 45 cm); negro

La gente lleva amuletos de piedra desde tiempos inmemoriales para protegerse de las energías negativas externas. Una piedra protectora muy popular es la brillante Obsidiana negra. En el ajetreo, nos protege de demasiadas impresiones y energías que nos llegan al mismo tiempo. Con su apoyo, podemos mantenernos centrados y separar lo importante de lo que no lo es, lo positivo de lo negativo. La piedra negra nos devuelve a nuestro centro y nos permite descansar en él -y por tanto en nosotros mismos- de forma relajada.

Llevado como colgante, el disco de obsidiana nos protege de ceder demasiada energía propia a los demás y, por tanto, de volvernos impotentes nosotros mismos. Especialmente cuando estamos rodeados de mucha gente en la vida cotidiana, por ejemplo en la oficina, la Obsidiana está pensada para protegernos de las fuerzas negativas. También puede ser una valiosa protección contra ataques sutiles de individuos que no están bien dispuestos hacia nosotros.

Los espejos convexos, es decir, curvados hacia el exterior, son especialmente adecuados para una protección óptima, ya que no absorben la energía que incide sobre ellos, sino que la reflejan hacia la fuente. Colocados encima de la cama, deberían proteger al durmiente.

Cada piedra de espejo de obsidiana se entrega en un estuche de plástico con cierre a presión y un prospecto en alemán, francés, inglés y español en el que se explica la función del espejo de obsidiana.

En "Juego de Tronos", la obsidiana se conoce como cristal de dragón o zirtys perzys ("fuego helado").