Azurita sobre matriz (Marruecos), 07 - 10cm

Hace más de 3000 años, los antiguos egipcios utilizaban la azurita molida como pigmento de color para sus pinturas y, mezclada con clara de huevo, para maquillarse los ojos. El uso de la azurita también tiene una larga tradición en muchas otras regiones del mundo, por ejemplo entre la población indígena del suroeste de lo que hoy es Estados Unidos y en la dinastía china Ming (1368 - 1644). En Europa, el mineral fue utilizado por Alberto Durero y otros pintores renacentistas. El azul de la Azurita sólo se utilizaba como color de base, mientras que el lapislázuli, mucho más caro, se empleaba como color de acabado.

Al entrar en contacto con el oxígeno del aire, la azurita se transforma gradualmente en Malaquita, un mineral verde, razón por la que el cielo de los cuadros antiguos a veces tiene un claro tinte verde. Con la invención del "azul de Prusia" a principios del siglo XVIII, la azurita perdió su importancia como pigmento, pero aún hoy se utiliza en la restauración de cuadros antiguos.

El mineral fue bautizado en 1824 por el mineralogista francés François Beudant en referencia al color "azur". La palabra latina "azzurum" para azul deriva del persa ("lazaward", es decir, "azul cielo"); la región mediterránea francesa de la Costa Azul también recibió su nombre de este término.

Un pariente cercano de la Azurita azul es la Malaquita verde brillante. Origen Según el contenido de CO2 de la solución a partir de la cual se forman los minerales, se crea Malaquita o Azurita. Si el contenido de CO2 cambia en una fase posterior, la azurita se transforma en Malaquita pero conserva su forma cristalina típica. Los mineralogistas llaman a este proceso "pseudomorfosis".

Este bello ejemplar de coleccionista de malaquita azurita procede de la región de Alnif Oumjrane, en el sur de Marruecos.