¡Comienza el nuevo año! La naturaleza sigue en pausa, todo está en reposo. Nos espera un año lleno de posibilidades y promesas. ¿Qué pasará, qué vendrá? Se han hecho buenos propósitos, muchas cosas deberían ser diferentes, deberían ser mejores. Todo está abierto, todo parece posible.
El Larimar azul nos aporta paz ...
¡Comienza el nuevo año! La naturaleza sigue en pausa, todo está en reposo. Nos espera un año lleno de posibilidades y promesas. ¿Qué pasará, qué vendrá? Se han hecho buenos propósitos, muchas cosas deberían ser diferentes, deberían ser mejores. Todo está abierto, todo parece posible.
El Larimar azul nos aporta paz interior y estabilidad. Nos ayuda a salir de la fase invernal de retraimiento y estancamiento, apoyando el crecimiento espiritual y la acción creativa. Especialmente a principios de año, esta piedra puede ayudarnos a tomar las riendas de nuestra propia vida y a moldear activamente nuestra existencia. La apertura a impresiones procedentes de todas direcciones conduce a nuevas ideas y perspectivas.
El Larimar, la piedra preciosa azul del Caribe, se conoce en mineralogía como pectolita. Gracias a nuestros buenos contactos en la República Dominicana, la única zona donde se encuentra esta piedra, podemos ofrecerle esta piedra, que de otro modo sería muy cara, a un precio favorable. En nuestro surtido al por mayor, disponemos de Larimar en diversas formas, por ejemplo, como Piedra rodada, filamentos para la fabricación de joyas, pero también como cabujones taladrados y joyas de Larimar.
El Larimar se utiliza en la curación con piedras preciosas cuando se trata de tomar las riendas de la propia vida. Debido a su efecto, el mineral se utiliza a menudo cuando la paz interior y la serenidad -incluso ante cambios drásticos en la vida- son los objetivos de la aplicación. La reflexión constructiva y el fomento de la creatividad son otros ámbitos en los que el Larimar puede tener un efecto de apoyo.