El Coral petrificado es un buen compañero para los meses de verano:
La vida en la naturaleza está en su apogeo, todo rebosa vigor y energía. La luz y el calor llenan los últimos rincones fríos y oscuros. Los esfuerzos de la primera mitad del año muestran resultados tangibles, podemos sentarnos, ...
El Coral petrificado es un buen compañero para los meses de verano: La vida en la naturaleza está en su apogeo, todo rebosa vigor y energía. La luz y el calor llenan los últimos rincones fríos y oscuros. Los esfuerzos de la primera mitad del año muestran resultados tangibles, podemos sentarnos, relajarnos y disfrutar de nuestros primeros éxitos.
Si queremos trabajar codo con codo con los demás para lograr un éxito conjunto, el Coral petrificado es un valioso ayudante. La piedra fomenta un sentimiento de comunidad en el que los motivos egoístas y las disputas mezquinas pasan a un segundo plano. La cooperación ocupa un lugar central, se reducen los temores al contacto y se pueden lograr grandes cosas en beneficio de todos mediante la cooperación pacífica de todas las fuerzas.